Enero 14

Así, despacito y cabizbajo. Ibas contando los papelitos que se amontonaban en el cordón, mientras en tu boca, el cigarrillo se va desgranando en secuencias interminablemente distanciadas entre sí.
Saliste del café con una irreversible sensación de soledad como nunca la habías sentido antes. -Quizás es el efecto de las pastillas, que adormecen tu pasos y hasta el alma, pensé-. Mientras las personas de la esquina Rivadavia se agolpaban en la vidriera del bar, en donde una pantalla plana escupe imágenes de un medio oriente devastado por algo más que bombas racimo. Tal vez al doblar la esquina toda esa gente lo olvide.
La mañana salpicaba la calle de un gris viejo. Aparecían los primeros paraguas y ya casi escaceaban los taxis. Este principio de año se confunde con el de tantos otros. Dos mil....? Córdoba ofrecía solo un día más en el calendario.
De camino al trabajo, el camino al trabajo. El mismo. Un canillita te saluda, como todas las mañanas. Hoy cambió el "buen día" por un apagado e imperceptible movimiento de cabeza, conducta que terminó de cosechar en tu cabeza la idea de que quizás le debías el diario del día anterior. Semáforo. Rojo. La gente con frecuencia pierde la fe, y la correcta percepción de los colores.
A dos cuadras de la oficina te invade nuevamente esa transpiración ascendente y fría. Estas seguro de que necesitas unos mates amargos. Los metros faltantes se hacen kilómetros, y la distancia que cubren tus pasos ahora es mínima. Si quisieras ir mas lento no podrías. Simplemente te quedarías inmóvil, paralizado. A veces, incluso, esa duda te roba el sueño en las noches. Y entonces las pastillas. Por fin. Un escalón. El siguiente. Hasta contar treinta. Esa manía de aferrarte a los números para mantenerte despierto.
La radio te confiesa un alerta meteorológico. Sin querer derramas mate en el teclado. Abatido te desplomas en la silla pensando que este principio de año...Que este principio. Dos mil...?

1 comentario:

BeLén dijo...

Todo empieza una vez más, todo sigue igual aunque nos aferremos a los números para mantenernos despiertos como vos decís con la expectativa de concretar nuevos proyectos en los días que vendrán. Si fuera por la secuencia que sigen los números todo seguiría igual y muy monótono, está en nosotros hacerlos distintos el uno del otro.

Saludos!